Debo confesar que tenía expectativas de escribir bastante en estos días, ya que tuve dos feriados que se acoplaron al fin de semana, pero finalmente no pude escribir mucho. He avanzado poco y nada con mi historia. Hay varios motivos y puede que me intente justificar a mi mismo pero no voy a hacerlo. Lo que si he estado meditando en el costo que puede traer escribir una novela completa, no me refiero al costo monetario sino a aquel esfuerzo físico, mental y espiritual para terminar una obra. Vinieron a mi mente unas palabras pronunciadas hace mucho tiempo por Jesucristo, mi máximo referente de vida y sabiduría. El dijo lo siguiente:
"Si alguno de ustedes quiere construir una torre, ¿acaso no se sienta primero a calcular los gastos, para ver si tiene primero con qué terminarla?. De otra manera, si pone los cimientos y después no puede terminarla, todos los que lo vean comenzarán a burlarse de él, diciendo: Este hombre empezó a construir, pero no pudo terminar"
Estoy escribiendo lo que algún día será mi primera novela, antes de empezar a hacerlo había pensado si tenía lo necesario para terminarla y determiné que si lo tenía. A veces me estanco un poco y tengo muchas dudas, pero sé que al final llegará a mi objetivo, aunque el costo sea muy alto.
Un abrazo,
Guille
PD: Gracias a todos los amigos que pasan por aquí y me dejan sus opiniones y aliento, tienen un valor inmenso para mi.